lunes, 18 de diciembre de 2017

21 de Diciembre


SEGUNDO RITUAL

ORACIÓN DE BIENVENIDA:

“En nombre de mi Amada y Todopoderosa Presencia YO SOY, doy la bienvenida al Espíritu de la Navidad, quien baja a este planeta con la misión de DAR; te saludo, te amo, te reconozco y te bendigo Maestro Natividad. Te doy las gracias por la maravillosa labor de Amor, Alegría y paz que realizas. Abro las puertas de mi corazón, de mi hogar a tu radiación y te reconozco como huésped privilegiado a quien deseo agasajar. Solicito, acepto, recibo y realizo la abundante provisión para la humanidad, para mi familia, para mis amigos y para mí. Invoco la Ley del Perdón y del Olvido y la Llama Violeta Transmutadota para que consuma, transmute, disuelva y libere con Amor todo lo inarmonioso en mi hogar y en todo el planeta Tierra, para que la Paz, el Amor, la Armonía, el Equilibrio, la Alegría y el Orden Divino, regalos del Amado Natividad llenen mi vida y la de toda la humanidad”.

A continuación se hará una breve meditación invocando desde el espacio del Amor al Espíritu d la Navidad, luego cada cual leerá para sí mismo con mucha FE su lista de peticiones que habrá traído preparada a la reunión. Esto se hará antes de la cena y sin haber ingerido licor de ningún tipo en todo el día, pues se trata de un acto espiritual muy íntimo, donde cada quien procurará conservar la mayor pureza y el mayor recogimiento, para alcanzar vibracionalmente al Maestro Natividad y a los ángeles.


Una vez concluida la meditación donde nos acercamos espiritualmente a Natividad, haremos la bendición de las peticiones con la siguiente oración.




TERCER RITUAL:

ORACIÓN PARA BENDECIR LAS CARTAS DE PETICIONES

“En nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, en nombre de mi Amado Maestro Natividad, bendigo la Presencia, la Esencia y la Sustancia de Dios en estas peticiones, para que se realicen y se manifiesten, porque sé que serán cumplidas en mí y en toda la Humanidad. Gracias Padre, porque sé que ya está dado”.

Ahora se procede a quemar la hoja de peticiones, dirigiéndote mentalmente a los ángeles de la Navidad:

“Ángeles Integradores de la Abundancia, transmitan estas peticiones a mi Amado Maestro Natividad para que me sean conferidas sólo para el Bien, Amor y Perfección en mí y en toda la Humanidad”. Puedes irradiar las cenizas al viento si estás en un lugar abierto, o guardarlas en un sobre si te encuentras en un lugar cerrado.

Si se desea, en este momento se puede decir la oración de gratitud y despedida de la llama, la cual dice:

“Gracias a la Presencia de Dios Universal, a sus Ángeles y muy especialmente al Espíritu de la Navidad, quienes nos han asistido este día.

Bendita llama, expresión de la esencia luz de Dios, gracias por tu servicio obediente a la humanidad, regresa ahora al centro corazón de la creación para que seas atraída de nuevo a la acción a través de la invocación de la humanidad para expandir los bordes del reino del padre por todo el infinito. En la unidad de toda vida nos inclinamos y damos gracias por la oportunidad de haber participado en este servicio” (se apaga la llama).

Con la música navideña como fondo, al terminar el ritual se reparten abrazos a cada invitado, y sentiremos la luz dorada que se irradia desde el centro del Universo que nos bañará de bendiciones, hay una sensación de Unidad y de Paz.

Los regalos de Natividad vienen en las manos de los ángeles de la Opulencia, de la Prosperidad, de la Abundancia y del Suministro. Una de las formas simbólicas en que podemos manifestar esa generosidad es celebrando un brindis y una gran cena que compartimos al terminar el ritual de las peticiones. La bebida preferiblemente es el vino rosado, el cual no se tomará en forma exagerada para no perder el sentido espiritual del día tan especial que estamos conmemorando.

La cena se inicia con un brindis en honor a Natividad, luego el resto de la noche y de la Navidad depende de ti. Poco a poco iras creando tu propia forma de celebrar el día del Espíritu de la Navidad, pero siempre conservando el requisito esencial: Pureza de intención y de corazón.


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