sábado, 6 de julio de 2024

Magia de las Hierbas Parte 17

 XII.  SOBRE LA BOTÁNICA OCULTA Y LOS ENSALMOS Estableciendo alianzas con el Reino Vegetal

 



1.               PLANTEANDO EL TEMA

 

Se ha comprobado que el hombre con su intencionalidad puede influir en las plantas, tanto positiva como negativamente.

 

Cuando éstas perciben que son cultivadas con amor y afecto suelen tener mayor y mejor crecimiento, colores más brillantes, así como más flores y frutos.

 

En otras palabras, a las plantas les agrada en sobremanera, el afecto que puedan recibir de los humanos con quienes tienen contacto.

 

Sobre estas bases, es perfectamente factible establecer alianzas entre el hombre y las plantas; sobre todo si se realizan sobre el principio que un acuerdo, un pacto o una alianza, para ser altamente beneficioso, debe ser positivo y equitativo para todas las partes involucradas, o sea, que salga el Hombre ganancioso y las plantas también.

 

 

2.              SOBRE LOS ENSALMOS.

 

Los Ensalmos son fórmulas o combinaciones de palabras en verso o en prosa, ya sean pronunciadas, escritas o transmitidas silenciosamente por medio del pensamiento o el sentimiento de quien ha creado el Ensalmo.

 

Pueden ir acompañados de movimientos magnéticos de las manos o soplos de aliento energizado.

 

Son también llamados mantras o hechizos y son fórmulas mísiticas concebidas y expresadas en determinadas palabras.

 

A vía de ejemplo, veamos el siguiente Ensalmo:

 

“Yo te cultivo, cuido, riego y alimento con amor, para tus mejores formas de lozanía y crecimiento. A cambio de ello, neutraliza tú todo mal y negatividad de los habitantes de la casa que es nuestro Hogar.”

 

La repetición periódica del mismo Ensalmo para la misma finalidad, lo potencia por acumulación de la intención que lleva implícita.

 

 

3.               SOBRE LA GERMINACIÓN DE LAS PLANTAS.

 

No hay mejores plantas en cuanto a un vínculo personal y afectivo se refiere que las que uno mismo ayuda a traer al mundo.

 

Lo necesario para este menester, además del grano o simiente y un recipiente adecuado (usualmente una maceta) consiste en:

 

Tierra fértil ..................................

TIERRA

Aire sobre y dentro de la tierra ...

AIRE

Agua ...........................................

AGUA

Calor ...........................................

FUEGO


Vale decir, los cuatro elementos que componen absolutamente todo en el Universo y a ello debo agregar.

 

Un lugar donde hacerlo ....................... ESPACIO 

Un período de tiempo para lograrlo ..... TIEMPO 

Una simiente o grano fértil .................... VIDA

 

El proceso es inicialmente bastante obvio:

 

1)    Pongo tierra fértil en la maceta.

2)    Incorporo la simiente.

3)    Esponjo la tierra para que en ella circule aire.

4)    Riego cuidadosamente.

5)    Pongo al abrigo y al calor.

 

6)    Espero la germinación y el crecimiento en la oscuridad de la Tierra caliente, húmeda y aireada.

 

7)    Finalmente la original vida latente que despertó con la germinación, en función de los geotropismos desarrolla raíces en la tierra húmeda (Tierra y Agua) y tallos y hojas al aire y a la luz (Aire y Fuego).

 

4.              SOBRE LA GERMINACIÓN MÁGICA DE LAS PLANTAS.


Preparemos en un mortero una triple combinación de Hierbas:

I.    Para potenciar las plantas síquicamente y en el plano emocional.


Artemisa

Milenrama

Tomillo               Síquicas (5)

Canela en polvo

Jengibre



Marrubio

Romero

Nuez (el fruto)     Emocionales (5

Ruda

Genciana


II.    Para potenciar las plantas como enérgicas purificadoras de hogares y personas.

 

Altamisa

Manzanilla

Cáscara de limón                        Purificadoras (5)

Cáscara de naranja

Hierba se San Juan

 

III.     Para potenciar las plantas como poderosas protectoras de la casa y sus habitantes.

 

Albahaca

Helecho

Hierbabuena

Laurel                                             Protectoras (7)

Ortiga

Salvia

Tamarís

 

Son en total 10 Síquico emocionales, 5 purificadoras y 7 protectoras, en total son 22 hierbas para machacar en el mortero.

 

Con esta preparación haremos cuatro partes una para cada elemento:


TIERRA:

Incorporaremos a la tierra un cuarto de esta combinación de 22 hierbas y la mezclaremos bien antes de cubrir la maceta con la tierra.


AGUA:

Haremos una pócima (un te cargado) con agua mineral y una vez que esté colado y frío, dejaremos en la pócima la o las semillas a plantar, durante 24 horas.

 

AIRE:

Con otro cuarto de las hierbas haremos una colonia utilizando mitad agua mineral y mitad de alcohol rectificado.


FUEGO:

Guardaremos el cuarto final para sahumar la planta, una vez que haya emergido de la tierra.


5.               SOBRE EL ORDEN DE LA TAREA.

 

1)    Al trabajar en el mortero así como en alguno de los puntos anteriores o en las tareas que se dirán a continuación, debe utilizarse el ensalmo similar al del numeral 2, que usted haya personalmente formulado.

 

2)    Luego de plantar, riegue con el agua de pócima regularmente sin exageraciones. Como las pócimas resisten sólo dos días, puede prolongar su vida útil guardándola en la heladera. Saque lo que utilizará cada día con tiempo, para regar con agua a temperatura natural.

 

3)    Como la colonia demora entre 7 y 10 días en estar pronta, recién la utilizará luego de ese tiempo, una vez colada y en un pulverizador. Aunque aún no haya aparecido la nueva planta, pulverice igual, cada vez que riegue.

 

4)    Cuando la planta tenga 7 hojas, es el momento de sahumar. Haga esto sólo una vez por semana.


Puede plantar lo que sea afín con Ud. y recuerde que hay anuales, bianuales y más longevas. Estas son más convenientes. Recuerde que serán cultivadas en el interior y hay plantas más indicadas para ello.

 

También puede comprar una planta ya hecha o quizá tiene una o varias sobre las cuales trabajar. En este caso incorpore las hierbas a la tierra, riegue con la pócima, pulverice y sahumée, pero comenzando con dosis mínimas.

 

Y no olvide su ensalmo que puede ser uno sólo aunque lo utilice para varias plantas.

 

Plantas sugeridas pues de por sí son protectoras, purificadoras y armonizadoras son: VIOLETA AFRICANA, ANTURIO, HELECHO, CACTUS y VIOLETA DE LOS ALPES (ciclamen).

Otra ventaja de estas plantas es que naturalmente se desarrollan en el interior del hogar.

 


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