Hechizo para dejar de beber alcohol

 necesitarás:

Unos 15 trozos de papel

y un lápiz

Una botella de tu licor favorito

Una cuerda negra

Un vaso de cristal

Antes de lanzar el hechizo, dedica algo de tiempo a pensar en tus motivaciones por las cuales deseas dejar de beber alcohol. Escribe cada razón en un papel individual. Por ejemplo:

Gasto mucho dinero en alcohol

Odio la resaca

Beber en exceso perjudica mi salud

Lanzando el hechizo para dejar de beber

Sin embargo, debes buscar en tu interior las verdaderas razones por las que quieres eliminar el alcohol de tu vida y, después, anotarlas cuidadosamente.                       

Inicia el ritual preparando tu círculo mágico y meditando hasta que consigas aclarar y calmar tu mente. Reúne todos los papeles y ve leyendo cada uno en voz alta. Después, afirma justo lo contrario, como si ya hubieras dejado la bebida. Por ejemplo:

Gasto mucho dinero en alcohol se convertiría en “Tengo mucho dinero ahora que no bebo”.

Odio la resaca se convertiría en “Me siento bien porque siempre me despierto fresco como una rosa”.

Beber en exceso perjudica mi salud se convertiría en “Mi salud ahora es mucho mejor porque ya no bebo”.

Tómate el tiempo que necesites para sentirte como te sentirías si lo que dices ya fuese verdad.

Esfuérzate por experimentar esa sensación de felicidad y libertad de una persona no adicta. 

Después pon los trozos de papel dentro de la botella vacía

Cuando lo hayas hecho, ata el cordel negro alrededor del cuello de la botella y asegúralo con tres fuertes nudos.

Ahora coge el vaso de agua e imagina una apacible luz naciendo de su interior. Bebe el agua lentamente y siente cómo el agua purifica y bendice todo tu cuerpo.                       

Después di:

“Ya no soy adicto a la bebida. Que así sea.”

Siéntelo real y cierra tu círculo.

Entierra la botella en la tierra o tírala a la basura.

Cada vez que sientas la tentación de beber una vez hayas lanzado este encantamiento, tan solo bebe un vaso de agua y repite esa visualización de pureza.                        

Es muy importante concentrarse, visualizar y tener fe en lo que se hace para que funcione. 

No solo este ritual, sino cualquier otro.