Esta limpieza es muy buena para cuando queremos limpiar la
casa de las malas energías y sirve también para alejar los espíritus que están
metidos y no podemos sacar.
Necesitamos:
4 huevos
4 vasos de agua
1 manojo grande de ruda
carbón
incienso
sal
Encendemos el carbón y ponemos incienso, recorremos cada uno
de los cuartos rezando el padre nuestro.
Ponemos un huevo en las cuatro esquinas de la casa, no importa el tamaño de la
casa ni si tienes patio, debes dejar un huevo en cada esquina junto con un vaso
de agua.
Ahora recorre la casa pegando con el ramo de ruda en cada pared, repite un
padre nuestro en cada habitación y pasa con el incienso de nuevo.
Vas a poner una cucharada de sal en el agua de cada vaso, cuelgas el ramo de
ruda en la puerta principal y dejas el huevo junto con el vaso toda la noche.
Al otro día antes de mediodía, tiras los huevos sin abrirlos y el agua la echas
al drenaje para que se vaya, la ruda procura dejarla en la puerta y cuando se
seque la cambias por un ramito nuevo.
Si no puedes tirar los huevos al otro día, déjalos ahí hasta que los puedas
tirar
No los abras, las malas vibras deben ser encerradas y que se vayan.
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