Los árboles siempre han estado cargados de misticismo y
significados mágicos... no en vano, el árbol ha sido y es, tanto una fuente de
cobijo, como un generoso proveedor de alimento -con sus frutos-, y de la mejor
materia prima -con su madera-.
Hablar de la relación entre los árboles, la magia, los ritos
y las connotaciones místicas que han existido y existen todavía en las
diferentes culturas se haría una misión interminable... hay mucha información
en internet y libros sobre ésto, así que daré sólo unas curiosas pinceladas.
En algunos ritos paganos, los árboles son considerados seres
mágicos, a los que de ninguna manera se les puede dañar. Cada árbol tiene sus
cualidades mágicas propias, así pues,
al Arce se le relaciona en círculos mágicos con divinidad y
amor.
al Abedul con protección, fertilidad y nuevos comienzos...
el Olmo, considerado en la antigüedad como hogar mismo de
las hadas del bosque, se le asociaba a la maternidad y a las diosas de la
tierra.
Al llamado "Rey de los árboles", el majestuoso
Roble, está relacionado con las ideas de curación, longevidad y dinero. El
roble ha sido considerado sagrado por casi cada cultura del mundo,
especialmente por los Celtas, por su gran tamaño y longevidad.
Los Druidas y sacerdotisas, en tiempos pasados, escuchaban
atentamente el sonido de sus hojas durante horas, para captar e interpretar
mensajes adivinatorios... también las quemaban -siempre hojas ya caídas, pues
era considerado todo un sacrilegio el arrancarlas de sus ramas- para purificar
la atmósfera allí en donde practicaran sus rituales.
El Abedul, también llamado "La Dama de las
maderas", era usado por los Druidas para realizar un potente ritual
amoroso... según ellos, si quieres encontrar al amor de tu vida, escribe con
tinta roja en un trozo de madera de Abedul lo siguiente:
"tráeme el amor
verdadero"... entonces, quémalo junto con incienso, mientras recitas las
palabras: "Diosa del amor, Dios del deseo:
¡tráeme el dulce fuego del
amor!".
Una vez consumado el ritual, en breve conocerás a la persona
amada, la que estaba destinada a ser tu media naranja.
Seguimos con los Druidas, pues para provocar sueños que
estimulen la psique, recomendaban poner hojas de Fresno (para ellos un árbol
sagrado) bajo la almohada...
Existe un antiguo rito de brujería, todavía practicado
actualmente, en el cual aseguran que, tras una serie de ritos -siempre durante
las horas nocturnas y en mitad de un frondoso bosque- a los árboles se les
puede escuchar hablando... los que lo practican aseguran sentirse recargados de
energía cuando esto ocurre y lo agradecen enterrando una moneda o algún otro
objeto de valor entre las raíces de los árboles.
Finalmente, hablaré un poco sobre la curiosa expresión y el
acto de "tocar madera", que tanto parece tener el efecto de atraernos
la buena fortuna y alejar el mal. Sus orígenes son varios: en tiempos
ancestrales, tocar la madera de los árboles indicaba respeto por los espíritus
de los Dioses que habitaban en ellos.
En algunos ritos paganos, también se tocaba el tronco del
árbol como proveedor de energía y sanador. Por último también se cree que la
expresión puede tener su orígen por la crucifixión de Cristo en una cruz de
madera, y como símbolo de reverencia. Actualmente aún se sigue practicando el
rito de tocar e incluso abrazar un árbol por las nuevas religiones actuales de
tendencias New Age... en este caso tengo que decir que por lo menos no te
pueden cobrar por ello, así que mi recomendación es que busquemos un bosque,
localicemos un bonito y acogedor árbol y lo pongamos en práctica.
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