Lo más destacable de este ritual es
que lo podemos hacer para nosotros mismos o bien para una persona que sabemos
que necesita mejorar en ello. No hay una edad en la que se pueda o no hacer,
sino que es un ritual que nos puede ayudar tanto a los adultos como a los
estudiantes que deben hacer un gran esfuerzo en la época de los exámenes.
También debemos decir que este ritual
se puede hacer a cualquier hora del día. Es simple y efectivo si se realiza
adecuadamente.
Hojas de olivo
Hojas de laurel
Perejil
Vela verde
Una foto de la persona para la que
hacemos el ritual – Si es para nosotros mismos, no hace falta.
Un plato o pequeña urna
Trozo de papel
Bolígrafo verde
Para empezar, debes encender la vela
verde. Es importante que esta esté en el centro de la mesa. Debes colocar la
foto debajo de la vela, pero de modo que se pueda ver la imagen. Como hemos
dicho, si el ritual lo haces para mejorar tu memoria, no es necesario que uses
foto si no quieres. Siempre es más recomendable, pero no pasa nada. Pero, si es
para alguien de la familia o amigo, debes usarla
Luego, debemos esparcir las hojas de
olivo y de laurel a su alrededor y, luego, debes esparcir el perejil. Coge el
papel y el bolígrafo y escribe una pequeña frase en él para pedir que se te
ofrezca esta mejora. No es necesario que hagas un escrito muy extenso, pero sí
que pidas claramente qué pides y para quien lo pides.
Luego, debe poner las hojas de laurel,
olivo y perejil en el plato. Prende el papel con la llama de la vela verde y
mételo en la urna o plato para que se queme junto a las hojas. Cuando se haya
consumido todo, debes esparcir las cenizas al aire. Las puedes tirar en
cualquier sitio cuando haga viento o desde una ventana, por ejemplo. Y, por
último, solo te queda apagar la vela.
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