Para llevar a cabo conjuros de protección para alejar a las
personas nocivas de nuestra vida debes triturar una tiza roja con 50 gramos de
flores de ortiga seca. Posteriormente, se mezcla el resultado con una cucharada
de ruda en polvo. Escribe tu nombre en un papel e introdúcelo en un frasco
junto con la mezcla de polvo realizada. Ciérralo bien y mientras lo agitas
recita estas palabras: Que la alegría entre en nuestras almas y que quede atrás
la envida ajena que todo destruye. Al final, deja reposar el contenido en el
frasco durante tres días y posteriormente, guarda un poquito del polvo dentro
de un objeto pequeño, éste se convertirá en tu amuleto. Para mayor protección,
llévalo siempre contigo.
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