jueves, 24 de junio de 2021

Como ser Alquimista Parte XXXIII

IX El Regreso al Paraíso

 

 

       Parte I

 


No podía ser de otra manera, llegamos al capítulo nueve y tiene que finalizar este trabajo escrito, pues es el momento de descender a la novena esfera.

 

“Alterna la lucidez del Paraíso

 

con la noche profunda, plena de terrores.”

Goethe

 

            El número nueve, es sabiduría y regreso al Paraíso, salimos de la Arcadia        

            por fornicarios, es decir, por derramar nuestro semen, y si queremos    

            regresar deberemos entrar por la misma puerta por donde salimos, en este    

            caso, transmutando nuestras energías seminales y no derramando bajo         

            ningún concepto.

 

El V.M. Samael Aun Weor, nos devela el Arcano o Gran Arcano, de la siguiente manera: “Conexión sexual sin derrame seminal, sin eyaculación del Ens. Séminis” así se transmuta la energía creadora.

 

Anteriormente al Maestro Samael, el Maestro Huiracocha lo había develado pero en latín: “Inmisio membri virili in vagina feminae sine ejeculatium seminis”

 

Como podemos comprobar, estas revelaciones que por tanto tiempo solo se entregaban de labios a oídos y después de rigurosas pruebas, hoy están al alcance de todos. No obstante siempre en todo momento se conoció esta clave, pero solo la poseían aquellos que realmente eran merecedores de poseerla.

 

Deberíamos cuestionarnos, ¿por qué ahora se nos entrega a todo el mundo? ¿Acaso no será porque los tiempos apremian? ¿será como en los tiempos de Noe que se nos está invitando a entrar en el arca?

 

Así mismo tenemos que decir que nuestro arte sagrado está totalmente fundamentado en las tablas de la Ley:

 

1-Amaras a Dios sobre todas las cosas.

 

2-No jurar su santo nombre en vano.

 

3-Santificar las fiestas

 

4-Honrar a Padre y Madre.

 

5-No matar.

 

6-No fornicar

 

7-No hurtar

 

8-No levantar falso testimonio ni mentir.

 

9-No adulterar.

 

10-No codiciar los bienes ajenos.

 

Y si somos tan irreverentes, que no aceptamos éste decálogo por haberse quedado desfasado en el tiempo. El Maestro Samael nos invita a que

practiquemos los diez Mandamientos de la Nueva era de Acuario que a la letra dice así:

 

1-Amarás a tu Dios interno y al prójimo como a ti mismo.

2-Estudiarás la Doctrina Secreta del Salvador del Mundo.

3-No vitupere jamás al prójimo, ni hables palabras inmodestas o vanas.

4-Deberás sacrificarte por amor a la humanidad, y amar a tus peores enemigos.

5-Debes obedecer la voluntad del Padre, así en los cielos como en la tierra.

6-No cometerá fornicación ni adulterio, en pensamiento, palabra y obra.

7-Lucharás contra el mundo, el demonio y la carne.

8-Deberás ser infinitamente paciente y misericordioso.

9-Practicaréis el Arcano A. Z. F., con tu mujer.

 

10-Lavaréis tus pies en las aguas de la renunciación.

 

Y todavía nos añade nuestro Maestro:

 

Es ostensible y palmario que los troncos o tablas de la Ley, donde el profeta Moisés escribiese sabiamente por mandato de Jehová los diez mandamientos, no son en realidad sino una doble lanza de Runas, sobre cuyo significado fálico existe mucha documentación.

 

No está de más enfatizar la idea trascendental de que existen dos Mandamientos más en el esoterismo mosaico.

 

Quiero referirme a los Mandamientos once y doce, íntimamente relacionados con los arcanos 11 y 12 de la kabala.

 

El primero de éstos (o sea el undécimo) tiene su clásica expresión en el sánscrito Dharman Chara: “Haz tu deber”.

 

Recuerda hermano lector (nos dice el M. Samel) que tú tienes él deber de buscar el camino angosto, estrecho y difícil que conduce a la luz.

 

El arcano 11 del Tarot ilumina este deber: la fuerza maravillosa que puede dominar y sujetar a los leones de la adversidad es esencialmente espiritual.

 

Por esta razón está representado por una bella mujer que sin esfuerzo aparente abre con sus manos deliciosas las fauces terribles de Leo, el puma espantoso, el león furioso.

 

Con el undécimo se relaciona y se entrelaza el duodécimo Mandamiento de la Ley de Dios, ilustrado por el Arcano 12: “Haz que tu luz brille”.

 

Para que la Luz, que constituye la Esencia embotellada dentro del Yo, pueda realmente brillar y resplandecer, debe liberarse y esto sólo es posible mediante la Aniquilación Budhista, disolviendo el Ego.


Aquel que practique Magia Sexual, con distintas mujeres es adúltero, y ningún adúltero puede despertar el Kundalini.

 

Aquel que viole el sexto mandamiento de la Ley de Dios, (no fornicar) no puede fecundar las aguas de Mercurio, porque no posee entonces los fuegos solares.

 

La magia sexual, solo se puede realizar entre esposo y esposa.

 

Llamo hombre vicioso al amante popular que ama el cuerpo más bien que el alma; porque su amor no puede tener duración, puesto que ama una cosa que no dura.

 

Tan pronto como la flor de la belleza de lo que amaba ha pasado, vuela a otra parte, sin acordarse ni de sus palabras ni de sus promesas.

 

A lo cual contesta Platón: Pero el amante de una alma bella permanece fiel toda la vida, porque lo que ama es durable. Así pues, la costumbre entre nosotros quiere que uno se mire bien antes de comprometerse.

 

Arnoldo de Villanova, Alberto el Grande, Raimundo Lulio y muchos otros alquimistas, denominan al mercurio, esperma o semen.

 

Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual, sin engaño, para que por ella

 

crezcáis en salud. (San Pedro, primera Epístola, C. II, V.2)

 

Jesús vio a unos pequeños que mamaban. Y dijo a sus discípulos: Estos pequeños que maman son parecidos a los que entran en el Reino. Ellos le dijeron: Entonces, volviéndonos pequeños, ¿entraremos en el Reino? Jesús les dijo: Cuando hagáis de dos uno, y cuando hagáis lo que está dentro como lo que está afuera y lo que está fuera como lo que está dentro, y lo que está arriba como lo que está abajo, y cuando hagáis, el macho con la hembra, una sola cosa, de modo que el macho no sea macho y la hembra no sea hembra, cuando hagáis ojos en vez de un ojo, y una mano en lugar de una mano y un pie en lugar de un pie, y una imagen en lugar de una imagen, entonces entraréis en el Reino. (El Evangelio según Tomás Apócrifo

Gnóstico)

 

Cuando las corrientes positivas y negativas del Mercurio hacen contacto en el Triveni, cerca del hueso coxígeo, despierta, por inducción eléctrica, una tercera fuerza que es el kundalini.

 

No se puede derramar ni una sola gota sagrada, ya que todo esto permitirá que la serpiente, llamada Kundalini por los Indostaníes, ascienda por nuestra columna vertebral.

 

 

 

 

 

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario