INSTRUCCIONES SECRETAS SOBRE MAGIA Parte XIII

 

VI. 3.  La respiración abdominal rítmica.

           Aún más potente que la respiración abdominal controlada, la respiración abdominal rítmica no difiere en nada de aquélla, excepto en que las espiraciones e inspiraciones se efectúan a unos ritmos determinados. Su acción es verdaderamente mágica. Si practicas estos ejercicios antes de dormir, al despertar por la mañana observarás que habrás tenido muchos sueños y visiones.

           Estos sueños son extremadamente importantes, ya que muy a menudo contienen mensajes que nos dirige nuestro Yo Superior. Al final de esta sección, encontrarás un conjunto de técnicas  sencillas que te permitirán tener muchos sueños, a menudo premonitorios. Comprenderás entonces que, para el seguimiento de tus prácticas mágicas, es importante mantener un diario detallado de tus sueños, así como de las operaciones mágicas que practicas. De esta manera, actuarás con método, viendo entonces los increíbles resultados que vas a obtener y que tendería a olvidar con demasiada facilidad si no los consignaras por escrito. Pero, por el momento, he aquí los secretos de la respiración rítmica.

           Conocerás sin duda el dicho “ la música amansa las fieras “. Hay una gran verdad en ello. En efecto, según el ritmo de la música, tu corazón late más o menos deprisa. Algunos estudios realizados han demostrado la importancia del tiempo con el cual se toca una obra musical, y sus efectos sobre el ritmo respiratorio y cerebral.

           La respiración rítmica utilizará esta particularidad y casi te permitirá entrar en un estado de trance, conocido por los científicos como estado Theta. En este estado, el subconsciente, el Ego y el Yo Superior, se alinean unos con otros o, más exactamente, se funden en un solo “TODO”.

           Este estado es ideal para proyectar tus deseos en forma de imágenes mentales. Cuando este estado de trance va acompañado de una acción sobre los chakras mientras se está realizando una operación mágica, muy pronto tendrás el poder de realizar verdaderos prodigios.

           Para practicar la respiración rítmica, puedes ayudarte de un metrónomo o difundir música de relajación o clásica.

   Esquema:

           A        =        Fase de inspiración

          B        =        Fase en la cual retienes la respiración

          C       =        Fase de espiración

          D       =       Fase en la cual quedas sin respirar con los pulmones vacíos       

 

Número de pulsaciones:

 

                              A                  B                  C                 D

 

                              4                  2                  4                  2

                              6                  3                  6                  3

                              8                  4                  8                  4

                            12                  6                12                  6

 

Explicación: Durante una fase de inspiración, la fase A, cuenta mentalmente a tu ritmo, hasta 4, o cuenta mentalmente las pulsaciones del metrónomo o 4 latidos cardíacos. Después, bloquea tu respiración, la retienes, fase B, mientras cuentas mentalmente hasta 2 . A continuación, espira, fase C, el tiempo necesario para contar mentalmente hasta 4. Finalmente, queda sin respirar, fase C, el tiempo que tardes en contar mentalmente hasta 2 .

 

Observa la tabla. Como puedes constatar, acabamos de adoptar el ritmo indicado en la primera línea de la tabla. Puedes elegir cualquier otro ritmo. Lo esencial es que respetes el ritmo. Para ello, el metrónomo es notablemente eficaz.

           Como resulta evidente, debes respirar abdominalmente para que este ejercicio sea provechoso.