Ingredientes o elementos para este ritual:
1 vela de color rojo.
1 vela de color blanco.
1 vela de color amarillo.
1 rama de romero seco.
1 rama de ruda seca.
4 hojas de laurel.
1 carboncillo.
1 plato de barro o arcilla grande.
1 cuenco o envase pequeño de barro o arcilla.
100 gramos de sal marina.
1 lápiz.
Pasos para realizar este ritual:
Sobre el plato de cerámica o de barro, coloca los 100 gramos
de sal.
Con tu dedo índice, vas a dibujar una espiral en la sal, lo
que simboliza evolución y crecimiento.
Con el lápiz escribe tu nombre completo 2 veces en cada una
de las velas, lo deberás hacer de la siguiente forma: de la mecha a la base y
de la base a la mecha.
Sobre la sal deberás formar un triángulo con las tres velas,
deberás hacerlo de la siguiente forma: en la punta del triángulo, la vela de
color rojo, la de color blanco en la punta del lado derecho y la amarilla en la
punta del lado izquierdo.
En el centro del triángulo coloca el envase o cuenco de
barro, a continuación quema el carboncillo, cuando este se encienda coloca las
4 hojas de laurel, la ruda y el romero,
previamente trituradas.
Enciende las velas con el orden en las cuales fueron
colocadas.
Coloca los elementos a la luz de la luna.
Deja que estas velas se consuman por completo al igual que
los elementos que se encuentran en el cuenco de barro.
Al día siguiente toma las cenizas y espárcelas en un lugar
donde corra el agua, el resto de los elementos tíralos sin mirar atrás.
Es importante que al notar tu evolución agradezcas a la
próxima luna nueva, por los favores concedidos.
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